Un apartamento en Medellín que mezcla elementos y materiales que dan equilibrio

Artículos destacados

Un apartamento en Medellín que mezcla elementos y materiales que dan equilibrio

Mónica Barreneche

Tras la pandemia, una joven pareja decidió construir su casa con un propósito claro: crear un hogar donde se pueda permanecer a lo largo del día, sin tener la necesidad de salir. Y a fe que lo lograron, ya que este espacio les concedió el sueño de vivir en un lugar acogedor en El Poblado (Medellín).  

Apartamento diseñado por Susana Mejía
Susana Mejía.

Lo paradójico es que este hogar de ensueño se aloja en un edificio con más de treinta años de construido. Al momento de adquirirlo, el inmueble se encontraba deteriorado debido a incontables problemas en la administración, y el apartamento también se hallaba en muy malas condiciones.

“Es increíble cómo la gente se sorprende al llegar al edificio, porque no se imaginan que en una construcción como esta, deslucida por el paso del tiempo, pueda existir un apartamento con estas cualidades”, comenta Susana Mejía, diseñadora y cofundadora de la firma Diamantina & La Perla, responsable de esta remodelación. 

La distribución original era propia de la época: espacios contenidos, delimitados por muros y escasa integración entre unos y otros, especialmente entre los que componen la zona social. Sin embargo, presenta un área de unos 280 metros cuadrados, dobles alturas, amplias terrazas, dos niveles y grandes ventanales, características que Susana supo reconocer y aprovechar para crear lo que ella llama con gracia la casaclub. 

Detalles del cambio en el apartamento

La sala se transformó en términos espaciales, retirando los muros que antes la mantenían confinada y restaurando el parquet de madera del piso original. “La remodelación fue relativamente sencilla. Se basó en eliminar el exceso de muros para permitir que el espacio fluyera y la luz natural ingresara al interior”. Y para potenciar las bondades de su arquitectura, recuperó los materiales de origen natural e incorporó otros —también naturales— que crean un balance entre el pasado y el presente.  

El mobiliario de la zona hace eco de esa materialidad, usando piezas a base de cemento, madera y fibras naturales; además, predominan las formas sinuosas, como es evidente en la escalera metálica, que se curva levemente en uno de sus extremos, así como en la mesa de centro circular, apoyada sobre bases esféricas. 

Las esquinas del sofá, puf y poltrona también son redondas, para evitar la presencia de ángulos rectos. En este espacio, los colores se mezclan armoniosamente entre sí, pero sobre todo con el verde de los árboles. 

Sin duda, se trata de un espacio con identidad, que mezcla distintos elementos y materiales que dan equilibrio, más allá de las tendencias, que son efímeras. “Mi consejo: nunca casarse con una tendencia, sino buscar aquello que nos identifica”, afirma Susana Mejía.  

Comparte este artículo

Otros artículos

Conozca la increíble restauración del Teatro Santander

La restauración del teatro Santander en Bucaramanga, Santander, obra de los arquitectos Antonio José Díaz Ardila, Álvaro Tobón Hincapié y Miguel Antonio Prada Barajas, potencia la estructura original mediante el desarrollo de

Zaha hadid, una mente en tres dimensiones

Hoy, 31 de marzo de 2016 falleció la gran dama de la arquitectura y el diseño contemporáneo Zaha Hadid, arriesgarse con nuevos retos e inesperadas colaboraciones no era un dilema para la

Minimalismo contenido

Ubicada en una extensa área de pastos de hierba alta y ondulada, y bosques vírgenes, la ampliación del museo de la Fundación Glenstone por el estudio de arquitectura de Thomas Phifer and

Suscríbase a nuestro newsletter

Para recibir todo nuestro contenido