El nuevo Pelagos FXD es un homenaje a las décadas que los submarinistas de la marina estadounidense han llevado un reloj Tudor en la muñeca. Una de las principales características de su diseño es la caja de titanio satinado, de 42 mm, con barras de correa fijas, que surgen de un solo bloque de este material para darle un aspecto más robusto y confiable.

Otra de las cualidades de este modelo es su bisel giratorio unidireccional de 60 muescas, que además de indicar el tiempo transcurrido, cuenta con un disco de cerámica relleno de material luminiscente. A esto se suma su nomenclatura, que hace referencia al origen de este reloj, ya que FXD se refiere a las barras de correa fijas —fixed, en inglés— de la caja.

Detalles del diseño de Tudor

En términos estéticos, este modelo “está inspirado en los relojes de submarinismo Tudor utilizados históricamente por el personal de la marina estadounidense entre finales de los años sesenta y principios de los ochenta. De color negro, tiene los característicos índices cuadrados y agujas angulares, conocidas como snowflake, introducidas por la marca en 1969 para aumentar la intensidad de la luminiscencia de sus relojes en condiciones de poca luz”, afirman desde la compañía.

Sus correas hacen referencia a su pasado histórico, cuando los submarinistas estadounidenses equiparon sus relojes con correas de tejido, normalmente de una sola pieza. En este caso, la de tono verde bosque de una sola pieza, con hilo central rojo y sistema de autoagarre, es la configuración principal, mientras que la adicional es de caucho negro —también de una sola pieza—, con tejido en relieve.